viernes, 26 de diciembre de 2014

Cuando decimos adiós

Como quisiera que no existiera esta carta de despedida, que he escrito para ti, que no hubiese pasado el tiempo entre nosotros y que mi corazón te añorará como hace unos meses, pero cada día ha cambiado lo que siento por ti, te quiero ya no como hace unos meses pero si por ese hombre que un día me regaló una ilusión.

Te quiero porque me has enseñádo a amar a alguien aún en la ausencia, a comprender que aunque no sea lo que yo quiera no sea como era, me enseñaste la confianza y la fuerza que tiene el amor aún cuando ninguno de los dos ha arriesgado. Me dejaste claro que yo puedo irme al fin del mundo cuando amo a alguien, pero más que eso me has enseñado que puede existir un gran amor entre dos personas pero no un compromiso mutuo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario